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martes, abril 24, 2007

La fiesta de los libros

Es quizás una de las mejores creaciones del hombre. Las sociedades primitivas consideraban la escritura “un regalo de los dioses” y al parecer el primer ejemplar de tiempos históricos se atribuye a los sumerios que, usando la escritura cuneiforme, utilizaron la tableta de arcilla como soporte principal y en menor medida, la piedra, el plomo y los metales preciosos.
Su soporte material se ha ido adaptando al devenir de los tiempos y las sociedades: tableta, prisma, cilindro, rollo de papiro, códice,… Su importancia como medio de expresión y comunicación es incuestionable...: el libro.
Se utilizaba como flor ornamental en el siglo XVII a.c. en Creta; Rhodas le debe su nombre; de Cnossos proviene la primera imagen conocida; se cultivaban en el valle situado entre el Tigris y el Eúfrates hace más de 4000 años según se puede “leer” en las planchas de arcillas descubiertas en los templos de Ur; según la mitología griega es una flor de los dioses nacida de una gota de la sangre de Venus; las escrituras hindúes relatan que Lakshimidicha, diosa del amor y la belleza, le debe su nacimiento; en la mitología de Lituania la aurora se representa por una guirnalda de esas flores que atrae el amor del sol; símbolo de la belleza, el amor y la pasión para babilonios, sirios, egipcios, griegos y romanos….: la rosa.
Durante estos días han vuelto juntos a las calles los libros y las rosas, han inundado los paseos y las ramblas en la mano de gentes de todas las edades en una maravillosa explosión de primavera, unidos para descubrir y transmitir el placer de la lectura, el gozo del leer; para el disfrute del conocimiento, la aventura…, por “amor” a la belleza y a los libros.
Manet, Edouard: Mujer leyendo