"Amar" lo nuevo

Investigadores de la Universidad de Yamagata de Japón han publicado recientemente en Psychiatric Genetics, un estudio acerca del posible origen biológico de la neofilia (neo, nuevo; filia, amante de). Los neófilos son personas con tendencia a buscar constantes innovaciones, que sienten compulsión por adquirir productos novedosos. Tras estudiar una muestra de 324 individuos sin ningún tipo de alteración psiquiátrica concluyen que es una enfermedad relacionada con una variación en el gen productor de una enzima mitocondrial: la monoamina oxidasa A, que tiene funciones neurotransmisoras y es conocida por sus implicaciones en complejos procesos depresivos. Indican también que quienes padecen este problema son, en su mayoría, personas brillantes y con un alto nivel educativo que muchas veces no son conscientes de su comportamiento. La neofilia se da en la adquisición de distintos objetos en los que buscan lo exótico: en la comida, en la ropa, en la tecnología, en el arte, en alimentos, etcétera…, pero la electrónica y la informática con sus permanentes innovaciones son dos de los campos más proclives.

Pero por supuesto se han alzado voces críticas cuestionando la justificación genética de esta conducta. Hay quienes sostienen que independientemente de su posible base genética no puede negarse la importancia de los factores sociales, culturales y económicos, es decir la relación con la necesidad de marcar un status social. Otros como Colin Campbell, profesor de sociología de la Universidad de York, son más contundentes; cree que esa búsqueda por comprar novedades es un fenómeno reciente, lo que contradice su origen biológico: "Las sociedades premodernas tendían a ser recelosas con lo nuevo. El hecho de que seamos adictos a la novedad es una característica de la modernidad". Por su parte, el psicólogo Augusto Pérez Gómez, director de la Corporación Nuevos Rumbos, también ha manifestado sus reservas en cuanto a las bases genéticas de la neofilia, a la que considera "una justificación desde lo biológico de los intereses comerciales”.

Sea lo que sea, este colectivo se ha convertido para las empresas en un centro de interés prioritario al que dirigen estrategias especiales de marketing y ventas. Un trabajo de la consultora ACNielsen señala que la identificación de este grupo "es un factor clave para la supervivencia de un nuevo producto". Tienen una importancia estratégica, ya que "probablemente determinan el éxito de un nuevo lanzamiento".
Comprar, comprar…, lo nuevo de ayer está obsoleto hoy, o eso dicen…Educar para un consumo razonable es cada vez más complicado y más en estas fechas ¿o no? .

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