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lunes, julio 17, 2006

Sirius, Isis y Carmen.


A una distancia de 8,6 años luz de la Tierra, Sirius,- también conocida como Sothis-, en la Constelación de Canis Mayor, es la estrella más brillante después del sol. Muchas culturas concedieron gran importancia a su ascendente helicoidal (cuando aparece por primea vez en el horizonte después de un periodo de varios meses sin ser vista, 60 segundos antes de la salida del sol), que tiene lugar a mediados de julio y basaron su calendario en este acontecimiento. Los egipcios, -que la llamaban “la estrella del perro”, “la chispeante”, “la que chamusca”-, la identificaban con la diosa Isis. Además la tradición egipcia la asoció con los “días de la canícula” que se referían al periodo de 40 días al principio de cada año sotíaco y que coincidía con los días más calurosos del verano. Hay quien dice que por eso se aplica el calificativo de “día de perros” a aquellos días en los que el calor aprieta de lleno. Su aparición coincidía con la crecida anual del Nilo.
Su nombre procede del griego y significa “ardiente”, “reluciente”. Creían que esta estrella era un sol pequeño que daba calor a nuestro planeta durante la noche. Para los atenienses marcaba el inicio del ciclo anual y la representaban como un perro con dos cabezas, una que miraba al Año Nuevo y otra al Año Viejo.
Sirio, representación de Isis en los cielos, se levanta en las madrugadas de julio por el Mediterráneo Oriental anunciando buen tiempo para los marineros. Coincidiendo con el 16 de julio se celebraba,- con paseos marítimos-, la fiesta de Isis en su advocación de Stella Maris, nombre que, por otro lado, hay quien dice que viene de Astarté, diosa que los cristianos transformarían en “Reina de los Cielos” o "Estrella de los Mares”. Ese mismo día (ayer) celebra la Iglesia Católica la festividad del Carmen, nombre que procede del monte Carmelo, situado en Haifa, población marítima en el norte de Israel. Carmen (Karmel) significa en hebreo “jardín” y en latín “poesía”. En el siglo XVIII se convirtió en patrona de la gente del mar.
Van Gogh, V: La noche estrellada